Experiencia de Fecundación in vitro en las razas Berrendas del CENSYRA de Badajoz

Experiencia de Fecundación in vitro en las razas Berrendas del CENSYRA de Badajoz

Embriones de las razas Berrendas

 

El día 31 de mayo se realizó una sesión de aspiración folicular guiada por ecografía (OPU, de Ovum Pick Up) sobre 4 donantes de raza Berrenda alojadas en el CENSYRA de Badajoz, dentro del programa de conservación de la raza, consiguiendo 15 embriones que se encuentran congelados y pasarán a formar parte del Banco Nacional de Germoplasma contribuyendo a la conservación de esta genética. Hablamos con Daniel Martínez Bello, de Embriovet, y Gema Vara Solana del CENSYRA, ambos veterinarios especialistas en transferencia embrionaria.

-¿Qué actividades se desarrollan en el CENSYRA relacionadas con la conservación de las razas Berrenda en Negro y Berrenda en Colorado?

El CENSYRA de Badajoz tiene como objetivos la conservación, mejora y fomento de nuestras razas ganaderas, y realiza actividades relacionadas con el control de rendimientos en los centros de testaje (tanto de machos como de hembras) y con la reproducción animal. Posee un centro de recogida de semen y un equipo de transferencia embrionaria mediante los cuales se elaboran dosis seminales y embriones. Este material genético se utiliza para  difusión de la raza por inseminación artificial, y para conservación de la misma, almacenándolo en el Banco de Germoplasma de las razas Berrenda en Negro y Berrenda en Colorado, ubicado en el CENSYRA, que actualmente dispone de 30.677 dosis seminales de 34 donantes y 15 embriones. Hasta ahora todos los embriones producidos, transferidos  y almacenados se obtuvieron  por lavado (flushing), y esta es la primera vez que se utiliza la técnica de fecundación in vitro tras aspiración folicular en estas dos razas.

-¿Cómo es este procedimiento? ¿En qué consiste?

 La Fecundación In Vitro es una tecnología reproductiva en auge a nivel mundial, habiendo sobrepasado ya a la tecnología in vivo en cuanto  a su nivel de uso desde el año 2018 según la estadística mundial proporcionada por la IETS (international embryo technology society). Esta técnica consiste en extraer los ovocitos del interior de los folículos de cada ovario. A través de la vagina se introduce una sonda ecográfica dotada de una aguja conectada a un sistema de vacío. El veterinario manipula el ovario por vía transrectal y al posicionar los folículos en la línea de aspiración visible en la pantalla del ecógrafo va pinchándolos uno por uno. El líquido aspirado es recogido en un tubo estéril que rápidamente se procesa en el laboratorio para buscar y seleccionar los ovocitos. Estas células reproductivas femeninas necesitan 20-24 horas de maduración para poder ser fecundadas. Tras la búsqueda se meten en un medio de maduración en unos pequeños tubos especiales que se alojan en un incubador portátil que permite su transporte durante la noche hasta el laboratorio de fecundación in vitro, donde a la mañana siguiente se continúa con el proceso.

En el laboratorio, el primer paso a realizar es procesar el semen. Para ello cada pajuela se descongela, y se somete a centrifugaciones en un medio especial que hace de filtro para separar los espermatozoides muertos. Con el semen ya procesado se calcula una nueva concentración, óptima para cada semental para proceder a la fecundación. La fecundación propiamente dicha o la inseminación de los ovocitos se realiza en un incubador especial con condiciones atmosféricas controladas y en un medio de cultivo diseñado con las mismas hormonas que los rodearían en la naturaleza después del celo, en el momento de la fecundación. A las 18 horas se retiran los ovocitos de ese medio, se limpian bien y se pasan a un incubador diferente, con distinta composición de gases y donde se mantienen en el medio de cultivo definitivo hasta los 7 días post fecundación, momento en el que los que hayan fecundado y seguido su desarrollo hasta el final serán embriones ya formados, en estadío de blastocisto y preparados para ser transferidos en fresco en otras vacas (receptoras previamente sincronizadas para estar en día 7 del ciclo) o bien pueden ser congelados y conservados sin límite de tiempo para su uso cuando convenga.

¿Con qué finalidad se usa esta técnica en ganadería? ¿Qué ventajas tiene?

La finalidad de esta técnica es producir mucha descendencia de las hembras seleccionadas como donantes. En el caso de razas en peligro de extinción permite acumular muchos embriones en poco tiempo y además cada donante puede cruzarse con diferentes toros por separado incluso en el mismo procedimiento con lo cual se puede lograr gran diversidad genética.

Con respecto a la técnica tradicional de producción de embriones donde las donantes se hormonan por 4 días, se inseminan y se lava su útero 7 días después la FIV ofrece las siguientes ventajas:

  • Mayor repetibilidad: podemos hacer FIV cada semana o cada 2 semanas frente a intervalos de cada 6 semanas para la técnica convencional (in vivo).
  • Mayor producción de embriones por donante y año: el promedio por procedimiento varía para cada tipo de animal, pero es muy similar al obtenido con la técnica in vivo, entre 5 y 7 embriones viables por sesión, así que podemos hacer  más de 25 sesiones in vitro (cada 14 días) frente a 9 procedimientos in vivo en un año.
  • Mayor eficiencia en el uso del semen. Hasta 10 y más donantes pueden ser fecundadas usando una sola dosis en la FIV frente a 2-3 dosis necesarias por donante en la técnica in vivo. 
  • Posible en vacas preñadas. Desde 40 a 120 días o más en la mayoría de ejemplares. Como no se toca el útero, las vacas preñadas pueden producir embriones. Por un lado no se altera el ciclo productivo del animal pero además nos da acceso a muchas más donantes y a trabajar realmente con las más interesantes al no tener que limitarnos a las vacías.
  • Posible con o sin estimulación hormonal. El procedimiento in vivo necesita obligatoriamente una estimulación hormonal completa que implica muchos manejos y tratamientos a las donantes. La FIV puede realizarse en cualquier momento del ciclo aunque el resultado mejora cuando se sincroniza la onda folicular y todavía mejora un poco más si se hace una única aplicación de estimulación ovárica. En cualquier caso no supone ni la cuarta parte de manejos y tratamientos cuando se decide esta opción, con respecto al in vivo.
  • Posible en donantes viejas y/o con muchos problemas de fertilidad. La fertilidad obtenida depende de la fertilidad de las vacas y del semen que se emplea. Todos los factores externos al ovario y ovocito en sí, relacionados con el útero y oviducto no influyen en la FIV. Las vacas que no consiguen producir embriones por la técnica in vivo a menudo son también las peores en el técnica in vitro, pero aunque su producción de embriones sea inferior al promedio, suelen obtener algunos embriones y conseguir descendencia. Para muchísimas hembras subfértiles o infértiles es la única oportunidad para reproducirse.
ovocitos

 

-¿Por qué apostar por esta técnica en las razas autóctonas en peligro de extinción?

El caso particular de las razas autóctonas en peligro de extinción reúne todas las características para apostar por la FIV. Por un lado encontramos muchas hembras de edad avanzada o que aun siendo jóvenes tienen muy poca habilidad de producir embriones con la técnica in vivo. Todas ellas se benefician de la técnica in vitro. Al ser capaces de obtener descendencia de mayor número de hembras se logra mayor diversidad en el banco de germoplasma para sacar nuevos ejemplares, sobre todo nuevos sementales que aporten biodiversidad, y reduzcan la consanguinidad. Algunas de estas razas y algunos ejemplares especialmente son de difícil manejo, lo cual implica un alto grado de estrés cada vez que se manejan y aplican tratamientos, por lo que a FIV con mínimas intervenciones reducen el estrés y sus efectos negativos sobre la reproducción. El aprovechamiento máximo de cada dosis seminal es también una ventaja importantísima para los casos en que quedan muy poquitas dosis de determinados sementales. Es la opción para producir mucho más embriones y además con mayor número de vacas distintas. 

Experiencia con las razas autóctonas Berrenda en Colorado y Berrenda en Negro

En este caso ha sido una pequeña experiencia en 4 animales  muy concretos, dos de ellas Berrendas en Negro y dos Berrendas en Colorado. Dos de ellas gestantes y dos en programa de inseminación al mismo tiempo que se ejecutaba la producción de embriones. Se obtuvieron un total de 57 ovocitos (14,25 en promedio) de los cuales 53 continuaron el procedimiento tras descartar 4 ovocitos. Se fecundaron con éxito el 71% y llegaron a término a los 7 días 15 embriones de los cuales fueron criopreservados los 12 de primera calidad (entre 0 y 7 embriones por donante). Aunque la producción final es un poco inferior al promedio, hay que tener en cuenta que , no tenemos datos previos del rendimiento de esta raza en la FIV. Aun así un 30% de producción de embriones respecto a ovocitos de partida está dentro de niveles más que aceptables en un contexto mundial y supone un éxito para ser la primera vez que se realiza en estas donantes. El semen utilizado para la producción de estos embriones procede de machos donantes de  raza Berrenda en Negro y Berrenda en Colorado que se alojaron en el centro de recogida de semen del CENSYRA tras superar las pruebas de testaje para valoración individual en el Centro.

Embriovet es una empresa privada que aglutina veterinarios y biólogos especializados en embriología. Desde su sede en Galicia ofrecen el servicio de todas las tecnologías reproductivas en toda España y Portugal y en todas las razas bovinas. También realizan  la FIV en ganado ovino y caprino. En los laboratorios móviles equipados para la técnica de campo realizan las labores a pie de los animales, mientras la técnica in vitro se realiza en el laboratorio especializado de reciente construcción situado en Betanzos en la provincia de A Coruña. Embriovet es colaborador habitual del CENSYRA Badajoz con el que mantiene convenios de trabajo. Gracias a esta colaboración la tecnología in vitro está disponible y al alcance de las razas autóctonas de la misma manera que cualquier otra raza con mayor implantación en la producción comercial.